En los dedos del viento
En los dedos del viento el incendio se esparce,
el sueño de la noche es ahora un grito,
un diamante azulado en tu boca de nácar.
El ritmo de tu voz marca las horas
al despertar en la luna el silencio dormido.
Llora un niño, ladra un perro,
alguien se asoma y sisea en el eco
pero mi corazón se ha ido
detrás de tu sombra y tu gemido.
2 comentarios
Fernando -
edanmir -